El locador de futuros

Desde que finalizaron las elecciones el negocio de arrendador de aplaudidores para actos, comenzó a mermar, además ahora existe una nueva raza de periodista que cumplen la función de aplaudidores de actos, además por la misma pauta agregan al aplauso un número ilimitado de asentimientos con la cabeza.


Dada esta caída en el negocio y para no dar de baja a los aplaudidores, comenzamos un nuevo negocio de servicios, los locadores de futuros. Se trata de una empresa dedicada a ficcionar el futuro de los clientes.

El negocio se mueve lentamente, pero varios ya nos contrataron para ver su futuro más lejano. No todo es una simple actuación, el trabajo requiere de un amplio estudio, que incluye consulta a los vecinos, estudio de la personalidad del cliente y una proyección seriamente analizada, para evitar despertar falsas ilusiones. Dado que nuestro negocio no pasa por hacer creer a alguien lo que no es, para eso existen los compromisos políticos y nosotros no queremos competir contra nadie.

En la semana nos contrato Miguel, luego de realizar el trabajo previo, deducimos que la persona indicada para representar su futuro es Camila, aunque tendremos que pedirle que sea lo más femenina posible para alcanzar la proyección de futuro de Miguel. En estos momentos lamento no haber puesto una empresa de venta de pasados, podríamos haber vendido a Miguel una infancia con revistas de adolescentes y videos de Gran Hermano y hoy Miguel podría disfrutar de un presente fuera del closet.

La semana que viene debemos realizar la ficción del futuro de una mujer que milita en política, y para ello debemos conseguir permiso en un hospital de la región, para ponerla en la ficción como interventora, además debemos pedir permiso en un municipio para poner una silla vacía, en referencia a su futuro en la política. No es tarea sencilla ficcionar futuros, pero tratamos que estén siempre cercanos a la realidad.

No todos son futuros complicados de ficcionar, algunos son fáciles y no requieren de mayor utilería, por caso un ex funcionario provincial nos pidió una proyección de su futuro y nos bastó para representarlo, una tela negra y las luces apagadas.



Un día como hoy pero de 1813 Paulina A. Cople inventaba el acople macho para instalaciones eléctricas.